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domingo, 31 de octubre de 2010

Capítulo 17: Fiesta de Halloween

-Verás Jake… es que hay una fiesta en el instituto.
-Ah, que bien- dijo seco y giró la cabeza para seguir viendo la tele.
-Pues eso… no creía que fueses tan tonto como para no pillar la indirecta.
-La he pillado.
-¿Y…?
-Que prefiero que me lo preguntes tú.
-Aihs… ¿quieres ir al baile conmigo?-dije suspirando y a regañadientes.
-¿¡En serio!? Que guay tía- dijo aplaudiendo como una loca-¿Va a ser tipo americano con las animadoras y los jugadores de fútbol?- dijo con un entusiasmo muy exagerado.
-Vete a la mierda.
-¡Era broma! Ven anda siéntate aquí conmigo- me senté a su lado y él empezó a hablar.
-A ver, ¿de qué nos vamos a disfrazar?
-De diablo y diablesa.
-¿Estás de coña no? ¿vamos a ir conjuntados?
-No es culpa mia que sea una norma para ir a la fiesta.

Me intenté levantar, pero él rápidamente me alcanzó con su brazo que pasó por mis hombros haciendo que me volviera a sentar.
Nos quedamos los dos en silencio, yo podía oir su respiración, era suave y regular, parecía calmado, en ese momento levanté la mirada, que hasta ese momento había estado clavada en mis manos, que estaban junto a mis rodillas. Su rostro era sereno y no sé por qué me transmitía seguridad. De repente se giró de golpe y me pilló infraganti  mirándole y descifrando cada una de sus facciones.

-¿Qué pasa?
-Esto… nada
-Está bien, iré…

Ya ni me acordaba de la fiesta, a si que tardé un poco en contestar.

-Gracias
-¿Qué día es?
-¿Tú qué crees? El día de Halloween.
-Bueno, bueno y ¿A qué hora?
-A las 8
-Vale, entonces, ¿le parece bien a la princesa que la recoja a las 7:30 con la carroza?
-Ja-ja
-Que sosa, podrías seguirme el rollo.
-Puff, me parece bien mi querido CRIADO ¿alguna pregunta más?
-No
-Entonces me retiro a mis aposentos- me levanté del sofá y como dije me fui a mi habitación con una sonrisa de oreja a oreja. Cuando llegué, cerré la puerta detrás de mi y fui derecha a la cama, me tiré en plancha y me dejé caer, estaba un poco vaga, cuando me relajé me puse el MP3 y como era de esperar me quedé dormida. Cuando me desperté vi el reloj, me había quedado sopa toda la tarde. Me levanté y me dirigí al baño, estaba aún más cansada y pesada que cuando me acosté, me lavé la cara intentando despertarme, sin mucho éxito. Me cambié de ropa y me puse un chándal, para estar más cómoda y bajé a cenar.

Cuando llegué a la cocina me encontré a tío Santi, a Lara y a Jake riéndose, en cuanto me vieron se rieron aún más.

-¿Qué es tan gracioso?
-Hablando del rey de Roma- dijo mi tío
-Bueno, nosotros nos vamos-dijo Lara aguantándose la risa.

Y nos dejaron a Jake y a mi solos en la cocina, él todavía se estaba riendo y yo no sabía por qué.

-¿De qué os reíais?
-Nada, solo me estaban diciendo que tuviera cuidado contigo.
-¿Por qué?
-Nada…
-No habrán…
-Si

Entonces empezó a partirse el culo y a darle hostias a la mesa.

-He de decir en mi defensa que lo hice sin querer.
-Ya… claro… el hacer que mientras bailabas con un tío él se tropezara y se cayera encima de la mesa de los aperitivos fue sin querer ¿no?
-Como sigas así el siguiente vas a ser tú
-Oh, a si que lo aceptas
-Yo no he diho eso.
-Ya…
-Ah! Eres insoportable
-Gracias- me respondió sonriendo
-Uff que paciencia. La fiesta es mañana por la tarde ¿te vienes por la mañana al centro a comprar los disfraces?
-No puedo
-¿Por?
-Voy a ir a visitar a mi madre.
-Pero va a estar alli tu padre y…
-No mañana trabaja por la mañana, es una de las pocas veces que puedo ir a visitarla
-Si quieres te acompaño
-No Beca, no aguantaría que si vuelve a estar mi padre delante te hiciera algo, aquí estarás a salvo.
-Pero no quiero que vayas solo

No sé cómo pero había avanzado toda la cocina y me estaba abrazando.

-No permitiré que te toque
-Jake…
-No permitiré que te haga lo mismo que hizo con mi madre. No lo soportaría que hicieran daño a las dos personas que más quiero.

¿Me había dicho lo que yo creía haber oído? Yo creía conocer a Jake, su vida, su dolor, pero en realidad solo conocía una capa, esa coraza que siempre llevaba para no sufrir más, pero debajo de esa coraza el dolor seguramente lo inundaría todo por completo.
Me estaba apretando muy fuerte contra él, sentía que no podía respirar, sabía que era una forma para no tener que soltarme nunca para cuidarme, protegerme, pero ese momento, como siempre, lo estropeé

-Jake, no puedo respirar
-Lo… lo siento
-Nada…

Se alejó lentamente de mi hasta que solo nuestras manos estuvieron en contacto.

-Lo siento, dile a Lara que vaya contigo.
-Vale

Entonces me dio un beso en la mejilla y se fue. Yo me quedé en silencio como otras tantas veces y me subí a mi habitación, me tiré en la cama a pensar.
Me desperté y vi el calendario, hoy, hoy era la fiesta estaba muy ilusionada, me vestí y me preparé para ir de compras. Al final fui con Lara, nos recorrimos todas las tiendas de disfraces y todos los chinos que había y no tardamos mucho en coger uno para Jake, eran todos muy parecidos pero para mi… eso ya era otra cosa o no les quedaban o no había de mi talla o directamente no me gustaban.

-Cariño
-Dime Lara
-Si quieres… podemos ir a una tienda que conozco, a ver si te gusta.
-Vale, esta va a ser mi última esperanza, porque si no compramos algo ya no vamos a llegar ni a la fiesta.

Ella me guió por calles y callejuelas que no había visto en mi vida

-Ya hemos llegado
-Será broma.

Estábamos delante de una sex-shop

-No
-Esto, Lara…
-Tú solo entra, ya verás

Me metió a regañadientes y yo intenté cerrar los ojos, he de decir que a mi estas cosas me dan bastante cosa.

-Perdona-dijo Lara a la dependienta
-Dime-respondió sonriente
-Tienes… disfraces para Halloween de diablesa especialmente.
-Claro, sígueme.
-No hace falta que cierres los ojos, seguro que cuando pruebes todo este mundito te acaba gustando y todo.
-Lara… puag
-Jaja, siempre la misma reacción.

Se empezó a reir hasta que llegamos a la zona de la tienda donde estaban los disfraces.

-Este es el único modelo de diablesa que tenemos
-Vale gracias-dijo Lara-Pruébatelo cariño.
-Esto… no sé
-Tú solo pruébatelo, venga, venga

Y me empujó dentro del probador. Me lo puse y me costó un poco, me parecía a mi o tenía muy poca tela. Era una especie de corpiño pero sorprendentemente me quedaba bien, tenía una especie de tutú como falda y tenía cubiertas el trozo del pecho al cuello, excepto los brazos, con una tela transparente. Respiré hondo y salí del probador.

-Oh! Te queda genial
-Es un poco ¿cómo decirlo?... puta-dije bajando la voz.
-Que va cariño, lo que pasa es que a veces hay que provocar un poco.
-Ya
-Me gusta tanto que te lo regalo yo.
-No, no hace falta, a además no me acaba de convencer.
-¿Has visto la hora que es? O compras este o te vas en chándal

Acabé cediendo.

-Está bien…- suspiré
-Pues ya está, decidido

Cuando llegué a casa ya sabía lo que me esperaba.

-Bueno cariño…- dijo Lara- ahora… sesión de maquillaje y peluquería
-Oh no…
-Oh si…

Lara se metió conmigo a fondo de verdad, es que me hacía falta

-Lista
-Por fin- dije desesperada

Me fui corriendo al espejo, no me lo podía creer ¿esa era yo?
En ese momento apareció mi tío en la puerta.

-Beca, Jake está abajo esperándote, ya se a vestido y… ¿no pensarás ponerte eso no?
-Si
-Es muy… ya sabes…
-¿Provocativo? Ya lo sé pero es culpa de Lara a si que… habla con ella
-Culpable- dijo Lara
-Tengo que hablar contigo…

Aprovechando que tío Santi le echaría la bronca a Lara me escabullí y salí de la habitación. Cuando llegué a las escaleras vi a Jake debajo de espaldas.

-Eh! Jake- grité

Y bajé las escaleras.

-Oh, madre mía- dijo Jake- ¿qué te has hecho?
-Lo sé, lo sé, ha sido culpa de Lara
-Yo no he dicho que no me guste
-Eh tú!- gritó Santi a Jake desde arriba de las escaleras- no mires de esa forma a mi sobrina.
-Perdona-dijo bajando la mirada
-Y contigo señorita, tengo que hablar- dijo mientras bajaba las escaleras
-No puedo tío, llegamos tarde- dije mientras cogía la meno de Jake y le tiraba hacia la puerta y hasta la moto.

Me puse el casco y Jake el suyo y nos fuimos hacia la escuela, hacia la fiesta de Halloween. Al llegar estaba todo abarrotado de gente. Tras mucho buscar por fin encontramos a Sara y Bea.

-¡Chicas!- me quedé un poco callada al ver a sus acompañantes- creía que ibais a venir juntas
-Y asi iba a ser, pero creíamos que sería mejor que fuéramos chica y chico- me contestó Sara.
-Claro…
-¿No nos presentas a tu novio?- preguntó Guille, un cotilla de cuidado, era el típico que se mete donde no le llaman, eso si estaba bien bueno.
-No es mi novio- dije a la defensiva.
-Tranquila “gatita”- dijo esta vez Javi, el chulito repetidor de la clase, por el que todas las chicas suspiran, y nadie consigue tener excepto, por lo que podía ver, Bea.
-No la llames así- me defendió Jake, que hasta ese momento se había quedado callado.
-Bueno creo que será mejor ir entrando…-dijo Bea intentando calmar los ánimos.

Entramos en el gimnasio, donde se celebraba la fiesta, estaba llenísimo de gente, la música que sonaba era movidita y estaba muy alta. En cuanto nos adentramos, Bea y Sara se pusieron a bailar con sus parejas y Jake y yo fuimos a hablar un rato.

-¿Cómo se puede ser tan idiota?- preguntó enfadado
-No lo sé, seguramente nacieron así… oye ¿podrías entretener a los chicos un rato?
-¿Cómo?
-Yo que sé, preséntate o algo, me gustaría enterarme de por qué mis amigas han traido a estos dos.
-Vaaaaaleeeeee… pero que sea rápido por favor

Me iba a ir cuando Jake me cogió del brazo acercándome más a él.

-Se te olvida algo- dijo mientras se daba pequeños toquecitos con el dedo índice en la mejilla, yo obedecí  y le di un beso.

Después de unos segundos esperando a que Jake se llevara a los chicos conseguí hablar con ellas.

-¿Ha vosotras qué os dao?
-¿Qué?- preguntó Sara con cara de confundida.
-Javi y Guille, venga por favor.
-Tienen su encanto- dijo Bea sonriente
-Si claro, ya… y un buen culo también, no pensaba que ibais a caer tan bajo…
-Ah! Que exagerada, ni que nos hubiéramos acostao con ellos
-No, pero esto es peor.
-Estás dramatizando
-No, no lo estoy.
-Y lo dice la que queda con gente por Internet y la que lleva un disfraz de diablesa que se le ve hasta el hígado
-… Touché
-Venga, ¡vamos a divertirnos un poco!- gritó Bea

Después de un rato hablando me fui a por bebidas, estuve buscando a Jake por todo el gimnasio pero no le encontré, cogí la bebida y me metí entre la muchedumbre, hasta que le vi allí, hablando con mis amigas, no sé qué estarían diciendo, ya se lo preguntaría más tarde. Llegué allí les di las bebidas y me puse a hablar. Tras acabar una canción de Lady Gaga sonó una canción lenta y romántica, oí cómo Jake se ponía detrás de mí y me susurraba al oído:

-¿Quieres bailar mi diablesa preferida?

En ese momento me dio la vuelta, nos miramos a los ojos durante, apenas, 1 segundo. Y de repente nuestros labios se unieron en un apasionado beso
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Sí habeis leido bien BESO xD weno siento mucho haber tardado tantisimo en subir el caitulo, el plan era haberlo subido esta tarde pero como bien sabeis es halloween y no he estado en casa lo siento mucho... y como ibamos un poco pilladas de tiempo tampoco hemos podido poner la frase de Beca lo siento otra vez. Pues nada que esperamos que os guste el capítulo y FELIZ HALLOWEEN tenes cuidado con los fantasmitas xD Besos!!!


viernes, 29 de octubre de 2010

Capítulo 16: Te echaba de menos...

Después de la charla con tío Santi nos fuimos cada uno a nuestra habitación.
Entré en mi cuarto, me puse mi pijama de Snoopy y me metí en la cama. Estaba a punto de poder dormir cuando se abrió la puerta de mi habitación.

-Beca, ¿sigues despierta?
-Noooo- dije con tono cansado.
-Bien, entonces puedo entrar.
-¿Qué quieres Jake?- pregunté soñolienta.
-Es que… te echaba de menos…
-Que rico eres cuando quieres.
-¿A que si?- dijo sonriendo.

Me tumbé boca arriba y él se tumbó a mi lado, mirando al techo.

-Bueno…yo te he contado todo sobre mis padres… creo que deberíamos estar en igualdad de condiciones…al fin y al cabo fuiste tú la que querías contármelo- habló Jake atropelladamente.
-Jake yo…
-Pero vamos que si no me lo quieres contar, no pasa nada, lo entiendo.
-Jake- le interrumpí- relájate y sobre todo, respira
-Es que me estoy poniendo nervioso.
-No ya, si se nota.

Tras unos segundos de silencio pensé que Jake tenía razón y empecé a hablar:

-Mis padres murieron en un accidente de tráfico… por mi culpa- tras decir esto, rompí a llorar desconsoladamente por lo que Jake me abrazó.
-No te preocupes Beca… ya me lo contarás otro día.
-No Jake tendré que contártelo algún día y… cuanto antes mejor. Yo quería hacer una fiesta en casa de mi tío, invité a todos mis amigos, pero a última hora mis padres, al ver todo lo que estaba armando, no me dejaron ir, pero yo fui igualmente. Estuve alrededor de dos horas en la fiesta, en ese tiempo mis padres no paraban de llamarme al móvil pero yo siempre les colgaba. Cuando la fiesta se estaba acabando fui a la salida y vi cómo un coche se estrellaba contra un camión… era el coche de mis padres…
-Lo siento Beca, no debí preguntarte, no quiero que sufras por mis insistentes preguntas, y no quiero que vuelvas a pensar que fue culpa tuya… porque no lo fue.
-Si que lo fue Jake, si les hubiese hecho caso o por lo menos haberles contestado las llamadas nada de esto habría pasado.

Jake no sabía que contestar, por lo que se quedó callado, después de unos minutos de incómodo silencio, Jake habló

-Beca… no sé que decirte…perdóname
-Que te perdone ¿por qué?
-Por no saber cómo consolarte esta vez.

Entonces me abrazó, aunque yo esperaba el beso.

-Creo que es hora de irnos a dormir… ha sido un día muy largo…

¡Viernes! Me levanté, me duché y bajé a desayunar. Mi tío no estaba y Lara tampoco, pero el desayuno de Jake y el mío sí. Desayuné y me fui al instituto, quería que Jake me llevara en su moto, pero estaba tan rico dormidito que no quise despertarlo. Esta mañana se encontraría una nota mía:

Jake, me he ido al instituto. No he querido despertarte, pero te he puesto el despertador para que te de tiempo a llegar, más te vale llegar bien. Besos!!

Llegué al instituto y como siempre allí estaban ellas, mis dos mejores amigas, sonriendo y hablando. Me acerqué, las saludé y nos fuimos a clase.

-Goodmorning everybody.
-¡Buenos días!- dijimos todos a coro.
-Bueno, hoy vamos a hablar sobre el past continuous, pero antes me gustaría comentaros una cosa. Se va a celebrar una fiesta en el instituto de… ¡Halloween! Iréis por parejas, el único problema es que sois impares, a si que alguna pareja tendrá que ser de tres o que traiga a otra pareja, como queráis, bien, empezamos…

Inmediatamente Bea me miró y me guiñó un ojo, ¿a qué se referiría?
Las clases se me hicieron eternas y por fin salimos de clase.

-Becaaaaa –me llamó Sara- ¿vas a ir a la fiesta?
-No
-¿Por qué?- preguntó triste.
-Porque no tengo pareja.
-Don’t worry Beca- dijo Bea sonriente- pídeselo a tu amor platónico, el chico del que tanto hablas.
-No sé chicas…
-Oh! Venga y seguro que pasa como en las pelis, con el subidón  de la fiesta te besa- dijo Sara con una enorme sonrisa en la cara.
Ojalá- pensé

-¡Qué no! A demás no sabría de que vestirme…
-Pues…a ver, tenéis que ir conjuntados, porque es obligatorio por eso vamos por parejas… Ya está podéis ir de diablesa y diablo, a demás la diablesa es muy sexy.
-Puff… no sé
-¡Hay chica! Que sí, ¡píselo ya!
-No sé ya veré, de momento me voy a casa.
-Vaaaaale ¡Díselo!- gritaron mientras me alejaba.

Me alejé del instituto, me puse mi iphod y me fui. Al llegar a casa vi a Jake tirado en el sofá, viendo la tele.

-¿No tienes instituto?- pregunté.
-Si
-Y ¿por qué estás aquí?
-Es que no tenía ganas
-Ah! Que bien… esto… el que te dejemos vivir aquí no significa que sea un hotel, a demás deberías ir a tuto.
-Beca no es para tanto a sido solo hoy.
-Bueno… ah te tenía que contar una cosa… Verás hay una fiesta en el instituto…

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El cuaderno de Beca

Si mis ojos dicen te quiero… No pidas a mis labios una explicación…Las palabras se las lleva el viento y las miradas se las guarda el corazón…

miércoles, 27 de octubre de 2010

Capítulo 15: Explicaciones.

Tío Santi se fue a la cocina y Jake salió de debajo de la cama.

-Creo que nos ha pillado, ¿verdad?- dijo Jake.
-No… que va…- dije burlona.
-Entonces… ¿bajamos? A lo mejor todavía podría huir.
-Claro y me dejas a mí el marrón ¿no? Venga tira, que me tienes contenta.
-Voy…

Bajamos las escaleras riéndonos, aunque no viniera al caso  ya que nos iban a echar una bronca tremenda

-Creo que tu tío me va a matar.
-No… que va, solo te descuartizará, te picará en trocitos y luego me lo enseñará para que no se me olvide nunca.
-Oh vaya… eh! Pero ese no vale, yo no he hecho nada, ¿por qué tengo que morir?
-No sé pregúntaselo a él.
-Pero si eres tú la que me acaba de matar en tu imaginación… pero da igual.
-No es culpa mía que tenga tanta imaginación.

Antes de que pudiera replicar nada le di con la puerta de la cocina en las narices. Me estaba partiendo de risa cuando me giré y allí estaba mi tío con la cara de enfado, en ese momento se me cortó la risa y Jake entró en la cocina.

-Eh! Me has hecho daño, ¡auch! Jeje, esta te la devuelvo, esta noche no…- entonces se calló porque también vio a mi tío.

Él estaba con los brazos cruzados y con una mirada asesina esperándonos.

-Esto… tío… este es Jake- dije sin rodeos.
-Oh, por fin puedo ponerle cara a sus pies- dijo mirándole de arriba abajo.
-Hola- dijo Jake algo nervioso.
-Hola- dijo él con frialdad

Creo que fue el momento más tenso de toda mi vida, fuero dos palabras pero estaban llenas de incomodidad. Como veía que ninguno iba a romper el hielo, decidí empezar yo.

-He… tío, nosotros…
-¿Nosotros? ¿De que hablas Beca? ¿No estaréis saliendo? ¿No lo habréis hecho aquí, en mi casa? Estás embaraza ¿verdad?

A veces creo que mi tío está obsesionado con los embarazos.

-No, no, no pienses mal tío, solo somos amigos- dije ruborizándome mientras Jake se reía detrás de mí.
-Ya claro, nunca ¿no? Por eso se escondía de mi, sin mucho éxito, por cierto,- dijo mi tío intentando averiguar qué hacíamos o qué  habíamos hecho.
-No, nunca- dije mirando a Jake
-Bueno casi… pero no- dijo Jake con picardía
-¿¡Cómo!?- dijo mi tío con un grito de enfado.
-No, no, fue un malentendido- dije casi tartamudeando.
-Ya claro, te voy a decir una cosa Beca la próxima vez que te vea con Jake solo volverás a ver las luces de tu habitación ¿he sido claro?
-Pues va a ser un poco difícil.
-¿Por qué?- preguntó desconcertado.
-Porque vivo aquí- dijo Jake con una sonrisa en la cara.
-¿Cómo que vive aquí?- preguntó mi tío casi ahogándose.
-Si, que vivo aquí- respondió Jake con tono de obviedad.
-Bueno no hace falta sacar las cosas de quicio- dije asustada.
-Mira Beca ¿tu sabes lo que te puede hacer? ¿no podías tener un novio normal, que te llamase, te enviase rosas y que de vez en cuando salieseis al cine o al parque? ¿De verdad quieres a “esto”?
-Jake, me llamo Jake no soy una cosa- dijo enfadado
-Mira tío, primero, no somos novios, y segundo, puede que lo que quiera sea esto, por lo menos por ahora ¿crees que le habría dejado vivir aquí si no fuera por una buena razón? Pues no, y te lo puedo contar si quieres, si no confías en mi…
-Creo que si alguien tiene que contarlo,  ese debería ser yo- dijo Jake algo molesto, y yo sabía por qué era, a él no le gustaba que nadie hablase de su familia, ya que no quería admitir que su madre era maltratada por su padre y que para no sufrir y desconectar de este mundo, bebía mucho alcohol y ahora estaba en el hospital, sin comentar que su padre era un maltratador, que le habría gustado acostarse conmigo, insistiéndome delante de su mujer, porque todo le daba igual.

Jake se lo contó todo a Santi. A mi tío casi se le saltaban las lágrimas. Me dio un abrazo y otro a Jake, y esto fue lo que nos dijo antes de subir al cuarto de invitados y caer rendidos en la cama, aunque con una sonrisa en la cara:

-Siento mucho haberte gritado Jake, si lo hubiese sabido…- dijo Santi.
-No pasa nada, te entiendo- respondió Jake perdonándolo.
-Beca, puede quedarse todo el tiempo que quiera, porque ahora esta es su casa.

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Cuaderno de Beca.

No puedo decir si esto es verdad o es un sueño.

martes, 26 de octubre de 2010

Noticias =)

Hola!! Ante todo muchas gracias por seguirnos, somos pocas pero bueno... keríamos pediros un pequeño favor, a lo mejor pensais que tenemos un poco de morro por pediroslo pero eske keremos ke seamos mas para motivarnos un pokito xD por eso nos gustaría que corrierais la voz a cambio de ke nosotras hagamos lo mismo con vosotr@s de la siguiente manera: una vez por mes subiremos una entrada con los 3 blogs ke mas nos han gustado en ese mes (los capitulos) Si os gusta la idea participar y si no pues nada =) dejad comentarios con vuestra opinion. Otra cosa, ya que nos hemos puesto a hablar, queremos saber vuestra opinion sobre si tendríamos que hacer los capitulos mas largos, si notais ke falta algo etc. Y por último daros un pekeño adelanto
......... va a ver ESPECIAL HALLOWEEN que va a ser mas largo de lo normal y por primera vez nos vamos a juntar las tres para hacerlo ^^ 


lunes, 25 de octubre de 2010

Capítulo 14: Pillados

-Beca ¿puedo pasar?

Jake y yo nos miramos y solo pudimos decir una cosa:

-¡Mierda!- susurramos
-Corre escóndete.
-Ya, ya
-¡Venga!
-¿Pero dónde?
-Eh… debajo de la cama
-Eso es muy típico-me dijo con una sonrisa en la cara.
-Pues si quieres te meto en mi bolsillo mágico de Doraemon.
-Vale, vale… que carácter.
-¡Vamos!
-¿Beca?- preguntó mi tío.
-Voy… estoy desnuda.

Jake se escondió debajo de la cama y yo le lancé toda su ropa y su mochila detrás de él. Me coloqué el pelo, aunque no sé de qué serviría, y abrí la puerta.

-Hola tío Santi ¿qué querías?
-Tenemos que hablar ¿puedo pasar?
-Eh… claro

Nos sentamos encima de la cama y yo recé para que no aplastara a Jake.

-¿Sobre qué querías hablar?
-Mira Beca… últimamente te veo muy rara y me gustaría saber el por qué, no sé, llámame exagerado, pero yo creo que a ti te pasa algo.
-¿A mi? A mi que me va a pasar, si, si estoy como siempre, no tienes por qué preocuparte.

Esperaba que no le sonara tan falso como me lo parecía a mí. Porque yo no tenía ni un poco de labia para mentir, además, no lo hacía muy a  menudo.

-¿Hay algo que te preocupe cariño? Sabes que puedes decírmelo ¿verdad?
-Ya lo sé tío Santi, pero de verdad que no me pasa nada.
-¡Ya lo sé, es un profesor! Que pasa ¿no te traga? No, no, ya sé, te has enfadado con Beatriz, no que va eso no puede ser, nunca os enfadáis, ah! Pero con Sara ya es otra cosa…

Él seguía hablando y como otras tantas veces desconecté de la conversación, porque sabía que iba para largo… hasta que salió el tema.

-¡Ya sé! es un chico, es lo único posible que me queda.

¡Bingo! Pensé

-Seguro que es eso, aunque yo no me quiera dar cuenta ya eres toda una mujercita y estás en la edad de los amores.
-Tío Santi… no es eso, estás exagerando
-Bueno, pero quiero que sepas que cuando tengas cualquier problema tienes que contármelo ¿vale?
-Vale
-Bueno, no venía solo a eso, tengo que hablar contigo de otro… tema.
-Dime

¡Dios! ¿es que no se va a ir nunca? Yo no podía pensar en otra cosa que no fuera en Jake que todavía seguía ahí debajo y además hacía meses que no limpiaba por ahí, ahora sería una especie de armario del terror.

-Es sobre Lara y sobre mí
-Ah era eso
-¿Ya está? ¿Esa es tu reacción?- dijo sorprendido.
-Si ¿qué pasa?- dije desconcertada
-¿No lo ves raro ni nada?
-No que va, puedes hacer con tu vida lo que te plazca.
-Vaya… ¿no te importa?
-Que va, al principio me pareció extraño pero luego lo pensé, y no es para tanto
-¿Al principio? ¿Ya lo sabías?
-Bueno… lo sospechaba.
-Ah… pues bueno, luego nos vemos para cenar
-Vale

Se levantó y se fue dirección a la puerta, cuando estaba a punto de girar para salir de mi habitación se paró de golpe y se giró.

-Esto… Beca.
-¿Si?- ¿¡pero no se iba!?
-¿Le podrías decir al dueño de esos pies, que están debajo de la cama, que quiero verle en la cocina, ahora? 

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Cuaderno de Beca


Los que prefieren la sensatez y huyen de la locura son incapaces de sentir el amor verdadero.


domingo, 24 de octubre de 2010

Capitulo 13: ¿ Amigos con derecho a roce ?

Después de entrar Jake y yo fuimos hacia la recepción, menos mal que Jake optó por venir porque ni siquiera sabía el nombre de su madre.

-Bueno días, ¿en qué puedo ayudarles?- preguntó la amable recepcionista.
-Hola queríamos saber el número de habitación de la señora…
-Gloría Pérez Rivero- continuó Jake.
-Está en la habitación número 212, planta 2, pero ha pedido que no se la moleste, ¿son ustedes familiares?
-Si… soy su hijo, pero ¿ha sido ella quién a pedido que no se la moleste?
-No, ha sido su amable marido, no se separa de ella ni un segundo- afirmó son una sonrisa en la cara.
-Ya… pero soy su hijo seguro que se refería a que no la molestaran otras personas.
-Seguramente pero…

No pudo terminar la frase, ya que Jake me agarró del brazo llevándome hacia el ascensor, como no había nadie en el ascensor nos pusimos a hablar.

-¿Estás seguro de esto?
-Si, la que no deberías estar segura eres tú.
-¿Yo? ¿Por qué?
-Porque si está allí mi padre verás algo que no te gustará nada.
-¿Estará allí tu padre?
-Ya has oído a la recepcionista no se separa de ella.
-¿Estas completamente seguro de ir? No quiero que pase nada con tu padre.
-Tú misma lo has dicho antes, tengo que enfrentarme a él.

Cuando me quise dar cuenta ya estábamos en la puerta de la habitación, dudábamos entre entrar o no, a si que me armé de valor y llamé a la puerta.

-Adelante- dijo una voz masculina

Jake respiró hondo cogió mi mano y entramos dentro.

-¿Hijo?- preguntó una voz grave pero de mujer.
-Mamá…
-Jake creo que te dejé bien claro que no quería que vinieras.
-Si la verdad es que lo dejaste bien claro-dijo mientras se acercaba a su madre.
-¿Entonces que haces aquí?
-Visitar a mi madre
-Fuera
-No
-No me hagas llamar a seguridad
-Hazlo, haber que explicación les das
-No me vaciles muchacho o…
-¿O qué?- preguntó mirándole a los ojos
-¡Ya basta! ¡Es que no podéis parar de discutir ni un momento!- gritó la pobre mujer, cansada del comportamiento de Jake y de su marido.
-¿Qué has dicho?- preguntó el marido desafiante

Se fue acercando a ella, por lo que Jake se interpuso en su camino, iba a empujarle cuando sus ojos azulados se pararon en mí. Empezó a mirarme de arriba a bajo como un cerdo depravado, solo pasaron unos segundos pero me parecieron una eternidad, hasta que dijo:

-¿Quién es esta preciosidad?- preguntó mientras se acercaba cada vez más a mi.

Me quedé callada, no me salían las palabras, el padre de Jake me intimidaba mucho, menos mal que Jake contestó por mi

-Se llama Beca y es mi no… una amiga.
-Entonces si es una amiga no te importará que hable a solas con ella ¿verdad?- dijo mientras me cogío por la cintura y me acercaba un poco más a él, noté como Jake se tensaba.
-Si me importa
-¿Por qué? Es solo una amiga ¿no?
-Si pero una amiga… con derecho a roce, ya me entiendes.

Me empecé a poner colorada ¿Por qué había dicho eso? En todo momento me quede callada, no podía hablar, el padre de Jake me soltó la cintura y se dirigió hacia la puerta.

-Bueno, después de esta charla, será mejor que os vayáis.

La cara que había puesto se podía definir en pocas palabras: miedo, confusión, incomodidad. Jake lo notó, dio un beso a su madre le dijo que la quería mucho y salimos de la habitación.
El trayecto del hospital a casa fue realmente silencioso, ninguno de los dos se atrevía a decir nada. Al llegar a casa como siempre no había nadie, subimos a mi habitación, me senté en la cama y, cansada del silencio tan incómodo que nos había seguido durante todo el trayecto, comencé a hablar.

-¿Por qué has mentido ha tu padre?
-¿Qué?
-Me has oído perfectamente.

Jake suspiró y se tumbó a mi lado en la cama, apoyándose en unos de sus brazos, mientras me miraba a la cara

-¿Te refieres a los de amigos con derecho a roce?
-Si
-No sabes a lo que se refiere mi padre con lo de hablar contigo a ‘solas’ ¿verdad?
-Pues hablar conmigo a solas, no le veo el problema.
-Eres muy inocente ¿lo sabías?- dijo mientras se reía
-¿Por qué?
-Haber como te lo explico Beca… ¿no has visto lo baboso que se estaba poniendo contigo, como te ha cogido de la cintura, como te ha acercado a él? Por eso a preguntado si éramos solo amigos.

No me enteraba de lo que Jake me quería decir, hasta que levantó las cejas de forma provocativa.

-Quería… pero si estaba allí tu madre
-¿De verdad crees que le importaba?
-¡Será cerdo!
-¿Entiendes ahora por qué he dicho eso?
-Gracias… te debo una- dije sonriendo.
-No me debes ninguna preciosa.

Me miró a los ojos y me abrazó, estaba como en un sueño Jake conmigo en la cama, abrazándonos, pero alguien me despertó de él.

-Beca ¿puedo pasar?- preguntó mi tío mientras llamaba a la puerta

Jake me miró, no sabíamos que hacer, de esta no salíamos vivos

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El Cuaderno de Beca

Tener hijos no lo combierte a uno padre, del mismo modo en que tener un piano no lo vuelve pianista.

viernes, 22 de octubre de 2010

Capítulo 12: Perfecto e imperfecto.

-Jake me estoy poniendo nerviosa, cuéntalo ya.

Vi cómo dos lágrimas rodaban por su cara y sin pensarlo le abracé.

-¿Qué le pasa a tu madre?- pregunté con voz dulce.
-Está en el hospital- dijo cabizbajo.
-Pero ¿está bien? ¿ha tenido algún accidente?
-No. Coma etílico.

Debí haber puesto cara de idiota por que se me estaba empezando a abrir la boca.
No sabía qué decir, pero tenía que hacer algo, consolarle como él siempre había hecho conmigo.
Le vi con la cabeza agachada, con mi dedo índice le levanté la cabeza con delicadeza hasta que nuestros labios se quedaron a unos pocos milímetros. Tenía muchas ganas de besarle, pero pensé que no era el momento oportuno. Me miró con cara de confusión por no haberle besado, por lo que le dije mientras me separaba de él:

-La apuesta tendrá que esperar un tiempo.

Y por fin sacó esa sonrisa que tanto me gustaba. Nos quedamos un rato callados, abrazados, mirando las estrellas, no sabía que decirle hasta que Jake rompió el hielo.

-¿No quieres saber por qué mi madre prefiere emborracharse en vez de cuidar de mi?

Después de unos cuantos minutos sin saber que respuesta darle, se me ocurrió  decirle todo lo que pensaba, serle sincera.

-Mira Jake me muero de ganas pos saber qué pasa en tu vida, con tu familia, con tus amigos… te voy a ser sincera me encantaría saber lo de tu madre con la bebida, pero si tú no quieres contármelo está bien, no pasa nada.
-¿Por qué tienes que ser tan perfecta?- dijo suspirando y sonriendo a la vez.
-¿Eso es malo?- pregunté nerviosa por la respuesta.
-Pues claro que no, lo malo será cuando veas que yo soy todo lo contrario a ti, imperfecto, al igual que mi familia.
-Tú no eres imperfecto, los imperfectos son esos estúpidos niños pijos de mi clase que lo único que les importa es salir con la chica más rica y popular del instituto, y en cuanto a tu familia… me gustas tú no tu familia.
-¿Te gusto?

Empecé a ponerme colorada, la había liado ¿ahora que digo, ahora que digo? Piensa antes de hablar Beca, ¡piensa antes de hablar! Intenté desviarme de la conversación como pude y al final lo logré.

-Bueno, ahora no estamos hablando eso, cuéntame lo de tu madre.
-Es alcohólica porque mi padre también la pegaba y el alcohol era como una anestesia para los golpes, y para tratar de olvidar que su marido era un hijo de puta que también maltrataba a su propio hijo. Pero esta vez ha bebido demasiado, probablemente se esté llevando mi parte de golpes

En todo momento me quedé callada sin saber qué decir, al final opté por las preguntas fáciles y poco dolorosas.

-¿En qué hospital está?
-En La Paz.
-¿Quieres que vayamos a verla?
-No… no me apetece.
-Pero Jake…
-Lo siento pero no me apetece lo único que quiero es descansar.

Se levantó del suelo y comenzó a entrar en la habitación. Le cogí fuertemente del brazo.

-¿Por qué no quieres ir?- pregunté mientras el ni siquiera me miraba a la cara.
-… mi… mi padre no me deja.
-¿Y no piensas hacer nada? Es tu madre Jake.
-Ya lo sé ¿y qué quieres que haga?
-Pues ir.
-No puedo.
-Claro que puedes, enfréntate a tu padre.
-Ya lo hice una vez y no salió del todo bien…
-Pues inténtalo otra vez.
-No puedo Beca en serio.
-Pues yo voy, contigo o sin ti.

Me levanté, me vestí y me fui, no me paré a mirar si Jake me seguía o no, tampoco me importaba.
Salí a la calle y cogí el autobús, en veinte minutos estaba en frente de la puerta del hospital. Cuando me disponía a entrar alguien me cogió la mano.

-Jake- dije esperanzada.
-Beca, voy contigo

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Cuaderno de Beca.

A veces el momento más triste es un recuerdo feliz.

martes, 19 de octubre de 2010

Capitulo 11: Reencuentro

-¿Jake? ¿Pero que hace aquí?

El seguía tirandome piedrecillas y cuando fui a abrir la puerta del bacón me dio una en toda la frente.

-! Ahí ¡-me lastime
-Ups, perdona – me dijo con una sonrisa en la cara
-Yo no me rió - respondí seria aunque acabe riéndome, me hizo gracia

Cuando me di cuenta pare de reír  y puse un gesto serio, eran ya 5 días sin saber nada de el y si creía que al día siguiente de decirme tal barbaridad iba a correr a sus pies a disculparme lo tenia claro.
En ese momento me dolieron mucho sus comentarios, pero cada vez que pensaba en ello no hacia mas que sufrir así que decide olvidarme de el aunque sin muchos resultados.
-¿Que quieres?- le dije distante
-Subir – respondió
-Tal vez yo no quiera que subas
-Por favor… tengo que contarte algo, que disculparme
-No se espera que lo piense…NO
-Por favor

Entonces me miro con esa cara suya de cachorrito degollado, aunque intentaba que no me afectara por que estaba enfadadísima con el, no podía dejar de mirarle y como los dos sabíamos acabe cediendo.

-Esta bien, pero 5 minutos
-Gracias

No le costo mucho, subió por la enredadera y se encontró conmigo en el balcón antes de que pudiera decir nada se abalanzo sobre mi y me abrazo. No me dio tiempo a reaccionar sentía su aliento en mi nuca y sus brazos rodeándome la cintura.
Cuando se separo de mi , yo seguía quieta con las manos juntas sobre el pecho sintiendo que mi corazón palpitaba cada vez mas rápido.

-Beca… lo siento, fui un estupido no, no quise hacerte daño tan solo es que viniste en un mal momento yo, yo no suelo ser así, bueno ya sabes que no suelo ser así, bueno ya sabes no suelo gritar a nadie ni sobresaltarme no, no se lo que me paso…

El siguió hablando pero ya no le escuchaba solo podía pensar en ese abrazo tan poderoso y a la vez tan cariñoso y extraño.

-Jake-le corte- yo…yo te e dado un lugar donde vivir te e metido en mi vida y te e contado un poco de ella , pero el otro día estuve pensando que…que no se nada sobre ti, si tienes hermanos ,donde vives ,como se llaman tus padres , no se nada de ti Jake y creo que es porque no confías en mi y no entiendo la razón .

El siguió callado agachando la cabeza poco a poco

-Yo necesito saber mas sobre tu vida en ese aspecto eres para mi un desconocido, quiero que confíes en mi yo lo e hecho contigo.

Se sentó en el suelo apoyando la espalda en el bacón.

-No puedo Beca, ya no tengo fuerzas, no, no me quedan

Yo solo podía fijarme en esa cara cansada y tan hermosa.

-Beca, es sobre mi madre...

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 El cuaderno de Beca 




En la vida todos tenemos un secreto inconfesable, un arrepentimiento irreversible, un sueño inalcanzable y un amor inolvidable.